martes, 3 de marzo de 2009

UN ALMA PENDE DE UN HILO

A veces, cuando trabajas con personas que tienen una serie de dificultades, no te paras a pensar lo influyente que puede ser lo que tu les dices, e intentas mantener una cierta distancia terapéutica para poder ser objetivo y ayudar realmente a esa persona...

Pero, un día X del mes Y, sucede algo, hay un conflicto, la persona se derrumba y te toca mantenerte en tu papel, ponerle la realidad de frente, intentar que reflexione y que vea sus dificultades para que pueda trabajarlas y superarlas.

Le surgen mil preguntas, intenta buscar un por qué a todo lo que le pasa, su mirada interrogante parece que quiere obligarte a que seas tú quien le de esas respuestas cuando solamente ella las tiene, pero muchas veces resulta más fácil esperar a que nos digan lo que debemos hacer que ser nosotros los que indaguemos en buscar soluciones, nuestras soluciones.

Aparece una dificultad y se derrumba, tu estás ahi para acompañarla y ser su espejo, un espejo en el que vea la realidad, que puede no ser la que ella quiera ver. Lo intenta, lucha y vuelve a intentarlo una y mil veces, y cuando parece que todo va bien, que la vida comienza a tener un nuevo rumbo, que vuelve a recuperar la confianza de los suyos, cuando se hace consciente de lo que le pasa y ve la realidad de frente...Todo le parece un mundo y sus pensamientos se convierten en una bomba a punto de estallar.

Una bomba que termina con una persona en coma, y yo me quedo con la reserva y el cuestionamiento propio de si algo se me pasó por alto, de si pude hacer algo más,...Soy consciente de que no hay culpables, pero cuando te suceden cosas así, no puedes evitar pensar en ello.

Para ella y para toda su familia, ojalá que haya un despertar que sea el comienzo de una nueva vida, una vida llena de libertad, con satisfacciones propias lejos de ninguna sustancias...

Y para los que tengan dudas, se puede salir, se puede vivir,...sólo hay que querer ver la luz al final del túnel y, como ya os he dicho, no viajeis sin retorno en busca de la falsa felicidad.